lunes, 5 de noviembre de 2007

La razón de la pena



Hace varias semanas atrás me asaltaron. Resumida en una frase no significa nada, pero me han robado más que objetos, me han robado felicidad, me han robado compañía y me han robado la capacidad de sonreir. Hoy lo he reconocido, hoy me doy cuenta que lo infeliz que me siento viene desde ese día, un día después del hermoso concierto de Jorge Drexler, mi enamorado y mis amigos estaban conmigo. El mp3 grabó cada delicada palabra que salía de los labios de Drexler, grabó mis gritos y dedicatorias, grabó la incríble magia que se producía cuando la gente susurraba sus canciones, como una sábana que cubría todas las cabecitas negras que se ven desde el asiento.

(((((((mi guitarra y vooooos))))))


La cámara registró, mal que bien, las alboratadas manos de Joaquín, deja ver en su movimiento un pequeña parte de la energía que se forma en el pecho y sale por los poros cuando te sientes parte de una felicidad colectiva.

(((((remaaaaaa - remaaaaaa - remaaaaaaa)))))


El mejor concierto al que asistí en mi vida y la imprudencia se lo llevó. Me asaltaron, me asusté, me dejaron sin el mp3 y sin la cámara y hoy me doy cuenta que los extraño como si fueran un par de personas, que me siento desmembrada y sola. La violencia se llevó la voz de Drexler y no sabía por qué extraña razón no pude ver, hasta hoy, el único video sibreviviente más de 5 segundos.

(((((no entiendo cómo podia vivir anteees...)))))


Es la misma angustia que produce escuchar la canción que te recuerda el mejor momento de una relación que ya terminó, es la misma angustia, es la misma pena. Hoy empiezo a ver los videos del concierto en You Tube y siento mucha nostalgia. Dónde estará hoy mi mp3? En qué manos estará? Lo estarán cuidando bien? Estará protegiendo a otras personas del ruido agresor? Estará ayudando a otro a estudiar?, habrán botado sus audífonos?... Me extrañará?... Entonces le doy toda la razón a Joaquín, los objetos no son sólo objetos, nosotros somos gracias a ellos, como este teclado, monitor, como mis pulseras de colores, como mis ballerinas rojas.

((((La vida es más -compleja de- lo que pareceee))))


Es que las desgracias nunca pueden venir solas?!! La pena se dispersa en mis venas tan rápido como la alegría, dudo que eso sea un beneficio. Lloro, y parece mi mejor deporte. Contigo se fue mi fuerza. Mis viajes en el micro son muy solos, mi estudio más difícil; las tardes de gritos, insoportables. Cómo me encantaría verte de vuelta, te has ido en el peor momento. La vida y las penas son más duras. Sin ti no puedo formar una sola escena en mi cabeza, no puedo hacer encuadres, no deliro con los colores mientras miro fuera de la ventana, ni puedo llorar cuando deseo desahogarme, sin ti, lloro sólo cuando no puedo más. La tos de mi padre también es más triste. Sin ti no puedo ayudarlo a pararse, sin ti no puedo abrazar a mi madre, sin ti no puedo con la pena. Ojalá aparecieras un día en mi bolso y me des la paz que hoy, más que nunca, necesito. Eras incondicional.

(((((soledaaaaad, aquí están mis credenciales)))))


Siento que tu vida no ha terminado y que me hubiera gustado que termine a mi lado. Sin ti no voy a poder sobrellevar la muerte de otros, sin ti la muerte da más miedo. Tu perdida es un mal anticipo, te fuiste cuando empecé a perderlo todo, cuando vi que la brisa empezaba a llevarse poco a poco los granos de arena que tanto quiero. Ser sólo espectador es una insufrible maldición. Habrá que afrontar también tu pérdida, ya no estoy en la placenta, hay que intentar respirar el aire sin envenenarse, hay que cuidarse de los choros, hay que andar con cautela y fruncir el ceño. No te cuidé bien, te arriesgué y te pido disculpas. Seguro que la vida se compondrá y todo pasará y mejores cosas vendrán y tu destino llegue a ser mejor que el de cualquiera. Buena suerte querido mp3.

(((((la ilusión- de que viviiiiiiir- es indoloooorooooo)))))


No hay comentarios.: