martes, 18 de marzo de 2008

tocando fondo

Hoy no soy capaz de aclarar la mente. Maldita nebulosa que rodea los ojos. Y el vistazo autárquico de mi angustia da cuenta que me he convertido en un bruto y torpe animal durante mis escasos intentos de sacar la pena en pequeñas dosis. Soy como una eyaculadora precoz que en cuanto se da cuenta que todo está perdido deja de pensar en el otro y trata, patéticamente, de sacarle el mejor provecho a sus segundos. Así, cerrando los ojos, con la pelvis quieta y el torso convulsionante, lleno al desafortunado interlocutor mojado en lágrimas y aturdido en descripciones poco felices.

Y el resto del tiempo? Pues a sonreir se ha dicho! Si soy la payasa número uno!... Cuánta gente dispuesta a sonreir contigo. Cuán poco duran las flores.

No hay comentarios.: